¿Te da miedo formalizar con tu nueva pareja porque no sabés cómo lo tomarán tus hijos?

Cuando mi actual esposo y yo decidimos iniciar nuestro nuevo proyecto de vida, lo hicimos con las mejores intenciones de sacar nuestras vidas y la de nuestros hijos adelante. Sin embargo enfrentarme a la idea de que esta decisión pudiera afectar a mis hijos de forma negativa me atormentaba. En ese tiempo, escuché a alguien decir: “si tus hijos te ven feliz, ellos van a estar felices también”. El tiempo me demostró que estas palabras eran ciertas. 

Esta etapa de mi vida no fue fácil e implicó momentos de mucha tensión, lucha y perseverancia de parte de mi nueva pareja y de la mía. En ese tiempo yo no podía lidiar más con  los sentimientos de culpa que me producía saber que mis hijos sufrían a causa de la separación entre su padre y yo. Tampoco podía aceptar en paz el deseo de rehacer mi vida sentimental en una relación donde me sintiera valorada, respetada, amada y realizada como persona.

Escuchar a mis hijos reclamándome la presencia de mi nueva pareja, mostrando comportamientos irrespetuosos y haciéndole constantes desplantes, me ponía a dudar de mi rol de madre. Por alguna razón pensaba que mi éxito como mamá  tenía que verse reflejado en las caritas de felicidad de mis hijos. 

Finalmente busqué ayuda profesional, porque me di cuenta que estaba estancada, confundida y que sacrificar mi nueva relación sentimental era también truncar mi realización y mis sueños como mujer y como pareja. Entendí entonces que renunciar  a mis propias necesidades también terminaría afectando a mis hijos. El ejemplo que yo les estaba modelando terminaría por definir su propia búsqueda de la felicidad.

Si estás en una situación parecida, sin duda alguna un proceso de Coaching te va a ayudar. Podrás trabajar eficientemente en la formulación de Meta-Plan-Ejecucuión para clarificar hacia dónde querés llegar, logrando una transformación personal y una mejor calidad de vida.